El madridista Marcelo ha dirigido hoy la goleada (3-0) con la que Brasil se ha impuesto a Nueva Zelanda en Newcastle y que ha certificado a los de Mano Menezes como campeones del Grupo C de la Fase de Grupos del torneo olímpico masculino de fútbol.
La selección 'verdeamarilla' se ha impuesto con una superioridad aún mayor que el que ha reflejado el resultado final, un 3-0 plasmado con dos goles de Danilo y Leandro Damiao a la media hora, y un tercero de Sandro al inicio de la segunda mitad.
Marcelo ha sido el complemento ideal y el principal suministrador de juego, con sus incorporaciones por el lateral izquierdo y sus servicios en largo, para el cuarteto atacante brasileño de hoy, compuesto por Lucas, Neymar, Alex Sandro y Leandro Damiao.
Ninguno de ellos ha parado de percutir y percutir sobre una defensa 'kiwi' casi siempre superada y a la que martirizaban también las llegadas desde atrás de los laterales, Rafael y Marcelo, y los volantes brasileños, Danilo y Sandro.
Tanto ha sido así que Marcelo ha sido el mejor jugador de su equipo hasta que ha llegado el 2-0 y que Danilo y Sandro han marcado. A Brasil ni le ha inquietado la expulsión de Alex Sandro en el minuto 75, por doble tarjeta amarilla. La segunda la ha visto por tirarse dentro de área rival.
Tras un primer intento de Neymar con una media chilena a pase de Marcelo, Danilo ha abierto el marcador en el minuto 23 tras una incorporación por el centro en la que ha recibido la pared de Leandro Damiao antes de quedarse delante de O'Keeffe y batirle con una pequeña picada por encima.
El propio Leandro Damiao ha marcado el 2-0 en otra jugada similar nacida en un precioso taconazo de Marcelo a Alex Sandro, que ha cedido a su delantero centro para que, agradecido con el gesto, marcase a puesta vacía.
Lucas y Marcelo avisaron antes del descanso de la goleada que se cerraría en el segundo tiempo, con un tercer tanto para el minuto 52. Otra vez Marcelo generó la jugada. En esa ocasión un golpe franco en el que amagó primero Neymar y que llegó al segundo palo sin que nadie despejase ni rematase.
Sandro no desperdició la oportunidad y cerró un 3-0 que Brasil dio la sensación de haber podido ampliar a nada que hubiese querido o necesitado.
Nueva Zelanda, en la línea que acostumbran sus deportistas, nunca se entregó y, sobre todo tras quedarse en superioridad numérica, intento acortar distancias. Sus delanteros Wood y Smeltz no cejaron, pero tampoco pudieron batir la portería de Gabriel.
Así, Brasil continuará en Newcastle, donde espera rival para cuartos de final. Probablemente sea Honduras, si no se da ninguna sorpresa esta tarde en el Grupo D.
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