El Independiente Santa Fe colombiano se citará en la final de la Copa Sudamericana con el River Plate o el Huracán tras eliminar ayer en Bogotá -con un empate sin goles- al Sportivo Luqueño paraguayo. El Sportivo Luqueño necesitaba anotar para neutralizar la ventaja que el Santa Fe tenía por haber igualado 1-1 en la ida. Impuso condiciones, tuvo el control del balón y buscó tomar ventaja pese a jugar en los 2.640 metros de altitud de Bogotá. El Santa Fe optó por tomar reservas y basar su juego en un sólido planteamiento defensivo, para jugar con la necesidad del rival. Sin embargo, en el minuto 10 Wilson Morelo estuvo cerca de marcar con un remate que se fue por encima de la puerta de Arnaldo Giménez. En el minuto 22 Sportivo Luqueño pudo marcar tras un centro de Guido Di Vanni a Marcelo Báez, que llegó incómodo y no pudo rematar con claridad. Santa Fe se acercó nuevamente en el minuto 34 con un remate de Juan Daniel Roa que pasó por encima de la portería y en la etapa complementaria, el juego pareció abrirse en ambas porterías. En el minuto 60 el técnico uruguayo Gerardo Pelusso envió al creativo argentino Ómar Perez, quien aportó nuevo orden con bajo ritmo al Santa Fe. Un remate suyo de tiro libre que terminó en gol fue anulado por el árbitro chileno Enrique Osses por la posición irregular de dos jugadores del equipo colombiano. El equipo paraguayo por su parte comenzó a sentir el desgaste y la altitud y quedó a merced de los contragolpes del local. Al final del encuentro, Gerardo Pelusso y los suyos celebraron el histórico pase a la final de la Sudamericana.
EFE
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