Un gran gol del centrocampista brasileño nacionalizado italiano Thiago Motta en el minuto 73 del partido permite a la selección azzurra dejar atrás los fantasmas del Mundial de Sudáfrica y casi garantizarse un billete para disputar la Eurocopa en Polonia y Ucrania en el verano de 2012.
En un encuentro lleno de ocasiones y con una Italia volcada en el ataque, el centrocampista del Inter quiso demostrar que no es un mero sustituto de Andrea Pirlo (lesionado desde hace unas semanas) marcando el tanto de la victoria en su primer partido oficial con la camiseta azzurra.
El ex del Barcelona y del Atlético de Madrid, que debutó hace un par de semanas en un partido amistoso contra Alemania, también evitó el empate de Eslovenia a tres minutos del final despejando un córner que podía haber aguado la fiesta a los de Cesare Prandelli, que continúan líderes en solitario del Grupo C, con seis puntos de ventaja frente al segundo.
A pesar del dominio italiano, el partido comenzó con una gran presión de los eslovenos, que durante los diez primeros minutos llegaron a sacar hasta cuatro saques de esquina y a disponer de varias ocasiones frente a la portería del veterano Gianluigi Buffon.
La superioridad que los eslovenos mantenían en el centro del campo gracias a su esquema táctico 4-4-2 (Italia jugó todo el partido con 4-3-1-2) se esfumó después de que la selección "azzurra" recurriese a la calidad de sus jugadores, que acribillaron al guardameta esloveno Handanovic, sin duda el mejor de los locales.
Primero fue el centrocampista Riccardo Montolivo en el minuto 7, que aprovechó un rechace de la defensa eslovena para armar un gran tiro desde fuera del área, y después el delantero del Inter Giampaolo Pazzini, que en el minuto 23 estrelló un balón en la parte externa del larguero con el que enmudeció a la grada.
Pero Pazzini, que estuvo muy activo durante todo el encuentro y es uno de los máximos goleadores en su equipo, fue incapaz de marcar y acabar con la maldición de la selección, con la que no marca desde hace casi dos años.
Los eslovenos nunca arrojaron la toalla y aprovecharon los despistes de los italianos, especialmente del mediapunta Mauri, para coger la espalda a los defensores y poner en aprietos a Buffon.
De hecho, Koren estuvo a punto de poner por delante a su equipo en el primer tiempo gracias a un gran disparo que en el último momento Buffon consiguió despejar.
Ya en la segunda parte, nada más salir al campo, el delantero Ljubijanokic armó un fuerte disparo desde fuera del área que sorprendió a Buffon y se estrelló en la escuadra de la portería.
Tras esta clara oportunidad, los eslovenos se vinieron arriba durante unos minutos, pero los italianos sabían de la importancia de vencer este partido y volvieron al ataque hasta conseguir el gol de Thiago Motta, precedido de una gran jugada colectiva.
Durante el encuentro, todas las miradas estaban puestas en el ex madridista Cassano, la gran apuesta del técnico Prandelli desde que se puso al mando de la selección italiana tras la debacle del Mundial de Sudáfrica.
Es verdad que durante los 75 minutos que estuvo en el terreno de juego se ofreció a todos sus compañeros y jugó bastante mejor que en los últimos partidos con el Milán, en los que había pasado desapercibido, aunque en Italia todavía dudan de que sea el delantero adecuado para representar a la Azzurra en la próxima Eurocopa.
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