Una muchedumbre recibió ayer con honores al club Independiente del Valle, a su llegada al aeropuerto de Quito, tras lograr el jueves una histórica clasificación a la final de la Copa Libertadores con un triunfo por 2-3 ante Boca Juniors, en la mismísima Bombonera.
Coches de bomberos formaron un arco de agua bajo el cual recorrió los últimos metros del viaje de retorno el avión con el equipo ecuatoriano a la terminal del aeropuerto de Quito.
Decenas de personas esperaron la llegada de los dirigidos por el uruguayo Pablo Repetto para acompañar en un improvisado festejo a los Del Valle, que en la Copa de la Libertadores se medirán al Atlético Nacional de Colombia.
Hinchas del Independiente, entrevistados por la televisión local, aseguraron que acompañarán al equipo en Medellín, en el partido de vuelta de la final, para volver con la Copa. "Claro que iremos a Medellín y nos traeremos la Copa, porque este equipo humilde está para esas cosas grandes", señaló uno de los fanáticos.
La gente acompañó en caravana a Independiente hasta su reducto de Sangolquí, en Los Chillos.
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