Rusia ganó el viernes por 1-0 a Macedonia en la serie de clasificación previa para la Euro 2012 y se colocó como una de las favoritas para viajar al campeonato europeo como primera del Grupo B, en el que hasta compartía liderato con Irlanda y Eslovaquia.
Los locales, dirigidos por el técnico holandés Dick Advocaat, saltaron al campo de Luzhniki conscientes de su imperiosa necesidad de ganar el partido para no perder el tren de la clasificación para la Eurocopa 2012.
En el banquillo de los balcánicos debutaba el técnico escocés John Toshak, que aunque consiguió que sus chicos dieran la cara durante muchos minutos ante un conjunto teóricamente muy superior, no pudo mejorar la suerte del equipo, que deberá seguir como penúltima del grupo B con apenas 4 puntos después de siete jornadas. El encuentro no encontró un claro dominador durante prácticamente los 45 minutos del primer tiempo, con las defensas de los dos equipos haciendo aguas y dejando en mayor evidencia, si cabe, la falta de puntería y resolución de ambas escuadras.
Durante la primera media hora de juego, los macedonios tuvieron más iniciativa, pero sin apenas crear peligro.
Los momentos más intensos de la primera parte se vivieron en el último cuarto de hora, cuando ambos equipos dispusieron de sus mejores ocasiones, incluido el gol del ruso Semshov, que marcó a pase de la muerte de Arshavin en el minuto 41.
Apenas dos minutos después, el portero ruso rechazaba el mejor balón de los hombres de John Toshak, que tras tirar a las manos de Malaféev recogieron un rechazo del portero ruso, pero finalmente no pudieron controlar la pelota.
También minutos antes del gol de Semshov tuvieron otra oportunidad de hacer diana los macedonios, cuando Pandev recibió un peligroso balón en un fuera de juego que no pitó el colegiado, aunque eso sí, los rusos no tuvieron que lamentar el error del árbitro.
Al borde del descanso, Pandev vio la tarjeta amarilla por discutir con el árbitro, que no tardó en dar por finalizados los primeros 45 minutos del encuentro después de prorrogar un minuto el tiempo reglamentario.
Con la incorporación de Pavliuchenko, que sustituyó al autor del único gol de la primera parte Semshov, los hombres del Advocaat salieron a por todas en los primeros minutos de la segunda parte.
Hasta tres veces llegaron a la portería de Bogatinov en apenas cinco minutos, aunque nuevamente sin éxito.
Minutos después, la escuadra balcánica tuvo su oportunidad con una falta directa desde fuera del área, tirada con fuerza por Ivanovski, pero rechazada, no sin fortuna, por el guardameta ruso.
Los rusos, aún flojos tanto en defensa como en puntería, pasaron a dominar a los macedonios durante buena parte de los segundos 45 minutos.
Zhirkov, recién recuperado para el campeonato nacional ruso de la mano del Anzhi Majachkalá, protagonizó una bonita jugada en el minuto 64 deshaciéndose de dos defensas y dando un preciso pase a Torbinski, que tuvo menos suerte y dejó el esférico en las manos del portero balcánico.
El dominio ruso se tornó en agobiante para Macedonia en el ecuador de la segunda parte, cuando la escuadra local se acercó y tiró repetidas veces contra la portería de los pupilos de Toshak, eso sí, volviendo a demostrar que la puntería no es su mayor virtud.
Tras un último cuarto de hora del partido con los jugadores cansados después de correr de un lado a otro en un encuentro donde el centro del campo no existió, el árbitro pitó un final que da muchas alas a la selección rusa.
Rusia se fue del campo pensando en su siguiente cita clasificatoria, la que disputará, también en casa y a falta ya de tres partidos, el próximo martes con Irlanda, uno de sus rivales directos por la clasificación.
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