Este oficio, muchas veces imcomprendido por el público, es fundamental al momento de impartir justicia en el rectángulo de césped donde 22 jugadores se juntan para despertar las más grandes emociones del deporte a nivel mundial.
Por este motivo, no pasa inadverdtida la tarea de los 14 jueces centrales y 25 asistentes desde las bandas que actuarán en la cita continental. Están presentes los mejores de los 10 países de Sudamérica, incluyendo a dos del país anfitrión (Chile) y dos representantes de Concacaf, un mexicano y un salvadoreño.
El primer juez de la Copa
La primera contienda de la historia de la Copa América tuvo lugar el 2 de julio de 1916, hace casi ya 100 años.
El estadio del Club Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires (GEBA), hoy escenario de conciertos, fue testigo del primer encuentro de la cita sudamericana. Al frente y ante 3.000 espectadores, el juez argentino Hugo Grondona fue el responsable de administrar justicia en el duelo que protagonizaron Uruguay y Chile. Al final, el partido quedó en manos de la Celeste por 4-0, el primer campeón del certamen sudamericano.
El 16 de julio, día de la primera gran final, el estadio GEBA se vistió de albiceleste: Argentina y Uruguay protagonizaban uno de los primeros clásicos del Río de La Plata.
El juez asignado fue el chileno Carlos Fanta, quien se vio obligado a suspender el partido a los cinco minutos en el estadio GEBA por los incidentes.
Un día más tarde, Fanta dirigió los 85 minutos restantes de la gran final, esta vez en la antigua cancha del club Racing de Avellaneda, donde hoy se encuentra el estadio Juan Domingo Perón “El Cilindro”. El lance finalizó 0-0 y con la consagración charrúa.
En la última versión jugada en 2011, el juez uruguayo Roberto Silvera fue el responsable de dirigir el encuentro inaugural entre Argentina y Bolivia (1-1). La final entre Uruguay y Paraguay, con triunfo para el primero por 3-0, estuvo a cargo del brasileño Sálvio Fagundes.
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