La Razon
La selección de Brasil abrirá hoy (15.00) frente a Japón la disputa por la Copa FIFA Confederaciones 2013, en el estadio mundialista de Brasilia, presionado por su favoritismo y pendiente de que su estrella Neymar brille por fin con la seleçao.
Bajo el comando de Luiz Felipe Scolari, que regresó al banco auriverde a finales del año pasado después de la conquista del pentacampeonato mundial en 2002, la selección anfitriona inicia el examen más importante para el Mundial Brasil-2014.
"Brasil normalmente es visto como uno de los grandes competidores y siempre es uno de los grandes candidatos al título", admitió Felipao ayer. El torneo que se disputará hasta el 30 de junio reúne a campeones continentales, más España, el monarca mundial, y Brasil.
La seleçao se impuso el desafío de obtener su cuarto título de la Confederaciones. Aunque en casa eso implica, aparte de ganar, jugar bien, y es ahí donde los brasileños acumulan más deudas con la exigente afición. "Vamos a hacer todo para conseguir lo que queremos que es el título de la Copa Confederaciones y, lo más importante de todo que es la Copa del Mundo", señaló el astro Neymar.
El obstáculo inicial será Japón, la primera selección clasificada para el Mundial-2014. Dirigidos por el italiano Alberto Zaccheroni, los “samurai azules” son un equipo en franco crecimiento, reconocidos por su velocidad, disciplina táctica y con hombres de referencia como el volante ofensivo Shinji Kagawa (Manchester United), llamado el "Messi japonés", y el atacante Keisuke Honda.
"Es importante que mañana (por hoy) podamos ganar a Japón (...), perder el primer juego es una situación que intranquiliza totalmente", dijo el seleccionador brasileño, quien confirmó que saldrá con el mismo once que venció a Francia por 3-0 en un amistoso el pasado domingo. Con una línea ofensiva de tres (Hulk, Fred y Neymar), el equipo espera cosechar su primer triunfo, pero sobre todo reconquistar a la exigente "torcida".
Neymar, por su parte, siente la presión e intenta desembarazarse de la exigencia de ser el goleador del equipo, como lo fue en su exclub Santos. El ayuno de goles "no significa nada. Independientemente de estar haciendo goles o no, estoy jugando para la selección", declaró.
El delantero de 21 años no anota desde el empate a dos goles frente a Chile en un amistoso disputado el 25 de abril en Belo Horizonte. En total son nueve partidos (dos con la selección) sin celebrar un tanto, una de sus peores sequías.
Aun con la incógnita por el rendimiento de Neymar, Brasil es el eterno favorito, pero los japoneses quieren ser la sorpresa del Grupo A que completan Italia y México. En el Grupo B, la disputa será entre España, Uruguay, Tahití y Nigeria.
Las dos selecciones se han enfrentado nueve veces desde 1989, con siete victorias para los brasileños y dos empates. Curiosamente, las únicas veces que la seleçao no ha podido con los japoneses fue por los juegos de la Copa Confederaciones realizados en 2001 y 2005.
La otra cara del torneo
Más participaciones
Brasil acumula más participaciones en la Copa FIFA Confederaciones que ninguna otra selección. La edición de este año será la séptima que disputa desde 1997; todas ellas consecutivas. Ha ganado tres veces.
México, campeón
México es la única selección de la Concacaf que ha conquistado el trofeo; una hazaña que logró como país anfitrión en 1999, al imponerse por 4-3 a Brasil en la final. Vieron ese encuentro 110.000 espectadores.
16 años han pasado desde que Uruguay jugó por última vez una Copa Confederaciones. En aquella ocasión, el charrúa ganó sus tres partidos de primera fase y cayó en semifinales ante Australia.
‘No juega con 11’
El técnico brasileño, Luiz Felipe Scolari (foto), quitó responsabilidad a Neymar, mayor figura del equipo, y afirmó que el delantero de 21 años “no juega con 11 camisas” y aseguró que todos tienen “la misma responsabilidad”.
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